martes, 16 de junio de 2009

Miomentos

La verdad es ese camino que me escondes cuando buscas mi sonrisa al despertar, la verdad es la pluma que atrapas en verso cuando escribes acordándote de alguna noche fugaz, el pensamiento inocente del niño que observa el vuelo de una mariposa, la caricia que resbala por el río de un pueblo sin mar, el silencio atronador de un mudo al mirarte,. La verdad es cada vez que te busco y encuentro lo que hallo y me vuelvo a callar. La verdad, es cada rincón de la soledad elegida en mis poemas, los sonetos de un descenso a la humanidad, el cielo acalorado de una tarde opaca en el cristal de tus pupilas, el recreo incesante de las olas que duermen en tus manos. Mi vida es la verdad que descansa en tus silencios, el eco de confesiones que duermen en tus labios y el susurro incansable, hiriente y balbuceante de quien no sabe escribir letras por mas que lea en tus pupilas la forma de orar. Tiro de un carro de soledades emplumadas, de un puñado de momentos agolpados en rincones de sustancia, y miro atrás viendo un único horizonte que se aleja, viendo una única morada que se pierde, viendo que no vuelves mientras castigo mi vida con mi soledad.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Qué bien combinas las palabras, hasta emocionar.
Me marcho de vacaciones hasta septiembre; necesito desconectar de todo por un tiempo. Echaré de menos leerte.
Un abrazo fujerte, hasta entonces.

Miguel dijo...

Gracias amigo Octavio, espero que desconectes de verdad y pases unas buenísimas vacaciones que te conecten con ese otro yo que tanto buscas. Yo también echaré de menos tus letras.
Un abrazo fuerte!