domingo, 15 de abril de 2018

El final de la historia...

Queridos amigos:

si habéis llegado hasta aquí, es porque sois grandes investigadores. No tenía ninguna duda de vosotros, así que os paso la foto que guardo en mi carpeta desde hace años del lugar exacto donde creo que está enterrado el tesoro. Tal vez, podáis encontrarlo y recuperar el poema maravilloso que Juan Ramón escribió para su amor.

Gracias por haberme ayudado en esta dificil misión, yo seguiré aquí en este país lejano de cuyo nombre no quiero acordarme, pero siempre llevaré en mi memoria a Moguer, a Zenobia y a Juan Ramón, y solo os pido una cosa:

AMAD A LA NATURALEZA Y CUIDAD EL MEDIO AMBIENTE.

un abrazo muy grande amigos mios.


Raimundo Escudero