miércoles, 11 de marzo de 2009

Pecados

He cometido el peor pecado que uno puede cometer: No he sido feliz.
(Jorge Luis Borges)

En el camino, siempre en el camino y en la ingravidez de un alma que fluctúa entre etéreo y lo fugaz, entre el sueño y la plenitud. Un camino de sombras persiguiendo el desaliento y esquivando el yugo que se ciñe al omoplato hostigando la libertad. Ando ultimamente saltándome el celibato impertinente de las obligaciones que se afanan en dar grises a los días que nacen en colores sublimes dorados de un perfume cristalino con aromas irresistibles.
Dedico horas de vida a una lucha interna en busca de la felicidad, a romper con la impertinencia del presente, a sonreir cuando los aguijones perturban las estampas primaverales. No quisiera confesarme en un mañana que aún desconozco, porque estaría arrepintiéndome de estancias que aún domino y puedo cambiar a mi antojo. No es tarea fácil pero aprovecho las sistoles de mis mañanas para creer que soy feliz, y sentirlo, y teñir el alma con sonrisas plenas de libertad.
Lo mejor de la permanencia en las alcobas de la vida quizá no resida en las horas que duermas en ellas, si no en las que tengas despierta la capacidad de ser feliz.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Ser feliz, qué dificil conseguirlo, qué políticamente incorrecto confesarlo. Algunos trucos, no exigir demasiado de la vida, mirar hacia adentro y buscar lo mejor que hay allí, rescatarlo, ponerlo en valor. Y saber que siempre hay algo digno de admiración en esta vida, a pesar de todo.
Un abrazo, amigo.

Juanma dijo...

Estoy, como siempre, con Octavio. Otro truco: no creer que mañana será como hoy, ni para bien ni para mal.
Sabes bien que yo te escribo desde la felicidad.
Y siempre alucinado con tu forma de escribir, tan rica y sugerente.

Un abrazo, mi querido Miguel.

Miguel dijo...

Octavio: El manual de trucos demuestran buen manejo de los mismos, tomo buena nota.Un abrazo.

Juanma: Entiendo, y comparto tu felicidad como bien sabes, al mañana siempre miro con una pizca de desconfianza e indiferencia, ni para bien ni para mal. Gracias por tu gratitud.Otro abrazo

Rachel dijo...

hola, he entrado a través del blog memorias de una traviesa, me ha gustando este post, yo en el mío,de forma mucho menos poética, tb hablo de la felicidad, en tiempos tan negativos.
un saludo!