sábado, 12 de enero de 2008

Te necesito...

Cuando vuelvo, como cada fin de semana, me parece increíble que vaya a encontrarte donde siempre, con tu serena calma, o tu compás acelerado buscando refugio en el viento. Oculto en la inmensidad, acristalando cada golpe de espuma, hallo tu mirada cada tarde de sábado, y me encuentro. Me reconozco en mis palabras y en mis sentimientos, en mi humanidad y en mis errores, y doy gracias a la vida por tenerte. Es ese pálpito acelerado que no irrita, tan acompasado que no te deja dormir, pero excitante, penetrante y sutil como la seda que se escapa de las manos con el soplo de una caricia.
Me paso las horas inconscientes en tu regazo, vuelves cada noche a dormir en mi memoria, y aún me pregunto cuando te veo por qué me siento como un niño frente a un tanque de acero. Suelo decir cosas a la gente, incluso hablar, suelo soñar gratis en esquinas de soledad, pero nunca hablo de ti, ni de tus sueños, ni de los que compartimos, y no se por qué.
Creo que tengo miedo a perderte, a que encuentren tus maravillas en algún cuaderno de notas y quieran sustraerte de mi para siempre. A veces me pienso egoísta, pero compartir significa perder algo. No se bien como explicarlo todo y seguir disfrutando durante horas de ti, saborear tus orillas y perderme en tus profundidades sin que te aturdan los alagos ajenos. Mi humanidad es egoísta, no como la tuya, mi ser es posesivo, no como el tuyo, y mi vida es tuya como tu eres para mi. Se que no te irás, pero pueden llevarte, me arriesgo a ver si gano algo, a ver si rompiendo el tedio me dan monedas para comprarte, lo voy a hacer, te voy a compartir, quiero contarte y lo voy a hacer. Es un impulso, déjame que no lo piense, dame fuerza de tus olas y calma de tus orillas, deja que tu viento se lleve mis notas y que todo el mundo conozca tus maravillas, te necesito mar, te necesito, ...
[Ya me lo decía mi abuela, que vive en un pueblecito de la sierra, "lo echarás de menos, te acordarás de él", pero no lo creía tanto como ahora. Es esa extraña sensación de que te faltan cosas de tu niñez, no se explicarlo mejor pero a mi, entre trabajo, estudio, amor, amistad, me falta el mar...]